Un militar de la Tercera División del Ejército colombiano fue secuestrado por desconocidos en una zona rural del convulso departamento del Cauca, informaron este domingo las autoridades.

"En la vía que comunica los municipios de Caloto y Santander de Quilichao, departamento del Cauca, el soldado profesional Juan David Estrada Suárez, orgánico del Batallón de Operaciones Terrestres N.º 13 y quien se encontraba en estado de indefensión, habría sido secuestrado", señaló el Ejército en un comunicado.

Ante lo ocurrido, la Tercera División instauró una denuncia por secuestro y activó con la Policía "los protocolos y un completo dispositivo de búsqueda para ubicarlo".

"De igual forma, se ordenó un acompañamiento especializado a la familia de nuestro militar secuestrado", agregó la información.

Según el Ejército, en esa región opera la estructura Dagoberto Ramos, del Estado Mayor Central (EMC), la mayor disidencia de las FARC y a la que "se responsabiliza por la seguridad e integridad de nuestro militar".

Este secuestro ocurre en un contexto en el que cuatro policías han sido asesinados en el Cauca en las últimas horas en ataques supuestamente cometidos por el EMC, con el que el Gobierno tiene acercamientos para hablar de paz.

Uno de los ataques fue la detonación de un carro bomba en el corregimiento (caserío) de Timba, en el municipio de Buenos Aires, hecho en el que murió el subintendente Carmelo José García Gómez.

Esta madrugada también fue detonado un carro bomba contra otra subestación de Policía del municipio de Cajibío, también en el Cauca que no dejó ni muertos ni heridos.

Estos dos ataques se suman al asesinato el sábado de tres policías en una emboscada en una carretera de Morales, en el mismo departamento, en el que además quedó herido otro miembro de esa institución.

Ataques a las negociaciones de paz

El Gobierno y el EMC anunciaron en julio que llegaron a un acuerdo para instalar una mesa de negociaciones de paz que inicialmente estaba previsto que se comenzara el pasado 16 de mayo, pero los desencuentros entre las partes retrasaron el inicio de los diálogos.

El Ejecutivo, de hecho, suspendió en mayo el cese al fuego bilateral que tenía con esa disidencia en cuatro departamentos como respuesta al asesinato de cuatro indígenas menores de edad que intentaron escapar tras ser reclutados a la fuerza en el sur del país por el Frente Carolina Ramírez, que hace parte de ese grupo.

Tras el nuevo acuerdo, el Gobierno anunció los miembros de su delegación en las negociaciones, aunque no se ha informado sobre la fecha y lugar para la instalación de la mesa de diálogo.

Sin embargo, el ministro Velásquez criticó al EMC por los ataques de este fin de semana en el Cauca.

"El EMC quiere presionar un cese al fuego para escapar a la presión que viene ejerciendo la Fuerza Pública, pero el Estado no cederá en la persecución de esa organización criminal ni de sus finanzas ilícitas. La Fuerza Pública debe copar todo el norte del Cauca", expresó el alto funcionario.

EFE